En esta ocasión contamos con la vista de Israel San Román de la Torre y Agustín Vera Valencia, egresados de bachillerato en La Salle Pachuca y de la carrera de Arquitectura en La Salle México, para que nos platiquen un poco de su amistad y cómo es que decidieron fundar SAVE Arquitectos.

Guiado por el ejemplo de sus hermanos y las creencias religiosas de su familia, Israel eligió estudiar la preparatoria en La Salle. Al terminar, tenía claro que quería ser arquitecto; aunque su plan inicial era estudiar en Puebla, las circunstancias lo llevaron a buscar otras opciones de prestigio y así fue como eligió nuevamente La Salle, esta vez en la capital del país. Ya familiarizado con los valores lasallistas, no dudó en integrarse de nuevo a esta comunidad.

Por su parte, Agustín consideró distintas universidades, pero se sintió cómodo con el proceso de admisión de La Salle. Después de graduarse del bachillerato y tomar un año sabático en el extranjero, cursó el primer año de la carrera en el campus Pachuca, antes de cambiarse al campus en Ciudad de México. Este sistema de intercambios temporales y permanentes es un proceso que Agustín le reconoce a la universidad, pues se les permite a los estudiantes conocer otras ciudades y disfrutar su libertad e independencia como jóvenes adultos.

Ambos se conocieron en bachillerato. Aunque al inicio no eran tan cercanos, reencontrarse en la universidad estudiando la misma carrera fue una grata coincidencia. Con el paso del tiempo, las actividades académicas y las vueltas de la vida los fueron uniendo cada vez más.

“Compartimos muchas cosas en personalidad, los dos somos super pilas, nos gusta estar todo el tiempo activos, ver qué hacer, movernos. Creo que fue mucho de la inyección que nos dio La Salle”, comentaron.

En aquellos años, cuando la inteligencia artificial aún no era parte de la vida académica, aprovecharon las herramientas disponibles, aprendiendo por su cuenta con el apoyo de profesores e internet. Su iniciativa los llevó a ofrecer ayuda a compañeros a cambio de pequeñas cantidades, lo que sembró la semilla de un proyecto mayor.

Tras cinco años de trabajar juntos, en 2019 ambos fundaron SAVE Arquitectos en Pachuca, un nombre con la unión de sus dos apellidos y una referencia al “save” 💾 para guardar documentos en diversos programas. Su firma ofrece servicios de diseño de interiores, remodelaciones y desarrollo inmobiliario, lo que les permite generar sus propios proyectos sin depender exclusivamente de clientes externos.

Agustín destaca que emprender una empresa de arquitectura es muy distinto a trabajar de manera independiente, pues implica una gran responsabilidad: cubrir nóminas, mantener la oficina y liderar un equipo. Aunque estos aspectos no se abordan siempre en las aulas, han sabido sortear los desafíos del emprendimiento con éxito.

“Es complejo abrir un despacho, pero es super divertido”, asegura Agustín.

A lo largo de su trayectoria, han colaborado con muchos profesionistas, y reconocen que los egresados lasallistas destacan por su formación integral y calidad profesional. Les enorgullece animar a sus colaboradores a explorar oportunidades más allá de su empresa, convencidos de que la experiencia adquirida les facilita abrirse camino en el mundo laboral.

Israel y Agustín son un ejemplo de que, con preparación, constancia y visión compartida, es posible cumplir grandes metas. Y aún mejor si se hace en compañía de un amigo. Hoy, nos invitan a conocer y difundir el trabajo de SAVE Arquitectos, un proyecto nacido del espíritu emprendedor y de los valores que La Salle inculcó en su formación.

Te invitamos a visitar sus redes sociales:

Instagram: https://www.instagram.com/save_arquitectos/

Página web: https://www.savearquitectos.com/

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